Llevo dos meses coordinando y apoyando el lanzamiento del curso estrella de una de mis clientas. Diseñamos un plan de contenidos, le trabajé una estrategia de email marketing, le creé contenidos para sus redes y la asesoré sobre expectativas, estrategias y tácticas para el momento de su lanzamiento.
Una de las cosas más importantes que he aprendido en el último año es que las situaciones que vivimos no suceden contra nosotras o para torturarnos. Todo lo que nos pasa está matizado por la forma en la que nos lo contamos, por la lección que decidimos aprender de cada situación, eso que decidimos sacar, con lo que decidimos quedarnos. Yo no quería quedarme como la pobrecita que no pudo hacer todo lo que quería. Yo necesitaba que hubiera una lección más grande, algo que me indicara que todo esto sucedió por algo mejor.
¿Cómo es que se vuelve fácil lo difícil? Pues, accionando.
Con el email no hay algoritmos que combatir, solo tienes que evitar caer en la bandeja de spam y lograr que tus seguidores abran tu email.
El email te ayuda a crear, fortalecer y crecer tu comunidad.
Canva te permite crear presentaciones, grabarte presentando y hasta compartir la presentación sin salir de su web
Y es que esa es la clave de todo, ser consistente. Por eso, no me pongo a explorar porque pierdo tiempo que reduce mi consistencia. Mientras que en estos momentos, Canva me ofrece la posibilidad de:
Mi decisión fue mantenerlo lo más sencillo posible y crear un solo contenido que me funcionara para nutrirlo todo por al menos una semana, luego pensé que si trabajaba los temas a modo de series podía crear contenido que me sirviera para todo un mes y esa era mi gran meta.
Uff, si alguien me hubiera explicado todo esto, hace años que hubiera comenzado a trabajar con mis páginas de captura. Es más, habría comenzado con ellas antes de crear esta web...
Mailchimp me ayuda a llegar a mi tribu todas las semanas sin costo alguno Las redes sociales cambian todos los días. Los algoritmos se modifican en el momento en que…